Sin prisa

Sin prisa, Por Andrés González el 17/12/2022

Acá, al norte de la ciudad de Querétaro, es el convivio de las autoridades municipales con los periodistas de la fuente, en el lejano salón llamado “Casa Serra”, que tome al nombre del anillo vial “Fray Junípero Serra” donde se ofrece. Sin prisa, Sin prisa, Sin prisa, Sin prisa, Sin prisa, Sin prisa, Sin prisa

Tarde de viernes, de primera posada, de pesado transito citadino.

Y es que, entre la autopista y la avenida Constituyentes, se dio un fuerte percance que involucró al menos a ocho vehículos, entre estos un tráiler que transportaba cal. Y abarcó ambos carriles de Bernardo Quintana. De ese lugar y con rumbo al aeropuerto para tomar el anillo Fr. Junípero Serra, había una fila de unos diez kilómetros, el otro acceso era utilizando el pesado Paseo 5 de Febrero que ya se lo imaginará como estaba. Cuando ya caía la noche, por ahí me regresé. Y todo el tramo es una continua y agitada obra. Aquí el compromiso no para, porque se trabaja de día y de noche. Y también la circulación es lenta.

En tarde de viernes con accidente vial, noche de posada y día siguiente a la quincena, la ciudad se cimbra. Y parece colapsar.

“Casa Serra” se ubica en la parte nueva de ese anillo vial. Está, literalmente, en lo más norte de la capital queretana.

Por la distancia, por lo lento de tránsito, los comensales fuimos llegando a cuenta gotas. Y tarde, desde luego. El lugar es espacioso y bien ventilado. Un enorme y blanco enlonado nos cubría del quemante sol, sol de otoño, que quema, pero no calienta.

Cuando habría media asistencia, es que se acerca el alcalde Luis Nava Guerrero a quién le acompaña el periodista Dante Aguilar, el encargado de comunicación, que no se separó ni un solo momento del presidente municipal.

El caminar del alcalde es seguro; de sonrisa franca y abierta, va y saluda uno a uno de los periodistas que ahí asistimos. Y no solo nos saluda, sino que conversa casi con todos a quiénes a su paso encuentra. Nos habla por nuestros nombres para intercambiar pareceres.

Aquí, cuando la semana casi concluye, no se le ve prisa alguna. “La exigencia fuerte es en cumplirle a los queretanos, en la responsabilidad encomendada. ¿Y en lo otro? pregunto. No tampoco, ninguna prisa, porque eso no dependerá de mí. Habrá que cumplir primero en el cargo que se tiene y ya después…a ver qué pasa”.

Así, Luis Nava es un alcalde que no suda calenturas políticas. Le preocupa el hoy, el pesado trabajo con el que está cerrando el año, el que la ciudad esté tranquila; en superar – y pronto – los problemas de vialidad del tramo municipalizado de la 57, para apoyar en todo lo que al municipio incumba, en la obra del Paseo 5 de febrero.

“No hay tiempo para pensar más que en eso” reflexiona con dos o tres periodistas a quiénes pasó hasta nuestra mesa a saludarnos.

Pero sus calificaciones son altas en la generalidad de las casas encuestadoras. ¿Esas calificaciones tan altas ya las traía desde la universidad? El alcalde no contesta y suelta solo una espontánea risotada.

“La ciudad exige…y hay que cumplirle”.

El ambiente ahí – a pesar de lo pesado del tránsito – ya se había relajado. Disponen primero las viandas, vendría alguna rifa y Luis Nava – siempre acompañado de Dante – pronunció un brevísimo discurso, para desearnos felices fiestas y mejor año 2023.

Ojalá que así sea para todos; así lo deseamos ya en corto al alcalde, “también políticamente” le comenté.

“Lo que venga no me angustia, porque no depende de mí; mi responsabilidad de ahorita no me da tiempo de distracciones por lo que venga”.

Y continuó su camino… él saludo a todos sin excepción… el del trabajo como alcalde…sin prisa alguna, pero también sin angustias.

Andrés González Arias

Periodista de toda la vida, egresado de la escuela Carlos Septién García, catedrático en la Universidad de Guanajuato, analista político en radio y prensa escrita, además de Premio Estatal de Periodismo en el 2000.

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