¡AMLO, ardido de dolor!, Tras La Verdad, por Héctor Parra Rodríguez.
Pues sí, ayer lunes se reincorporó a sus funciones de secretario ejecutivo en el Consejo General del INE, Edmundo Jacobo, por órdenes de las autoridades jurisdiccionales. Regreso triunfante y forzoso. ardido, ardido, ardido, ardido, ardido, ardido, ardido, ardido
Por enésima ocasión los representantes de Morena en el seno del pleno del Consejo, volvieron a despotricar, no asimilan la primera derrota, aunque no sabemos si será temporal o definitiva hasta en tanto no resuelvan el fondo del asunto las autoridades del Poder Judicial de la Federación. Por lo pronto, AMLO y sus bufones perdieron el primer encuentro en el «ring de la justicia».
AMLO no se puede quedar callado. En la retórica de sus mentiras del día dijo: «Ayer una fiesta del INE y todos los medios aplaudiendo porque le habían devuelto el cargo a un integrante del INE que lleva 30 años ahí y 15 como funcionario clave del INE, ya ven que el INE no se toca. Entonces le dan un amparo los del Poder Judicial que son los mismos, pero además todos sus achichincles y amigos y socios aplaudiendo y los medios de información todos celebrando porque se había reivindicado la democracia, una gente que ha tolerado fraudes, que está por eso ahí, complemente antidemocrático, pero pertenece a la camarilla que ha manejado al INE durante mucho tiempo y aplaudiéndoles».
No se cansa, ni se cansará de mentir el presidente López. Dice el dicho popular: ¿De qué mueren los quemados? ¡De ardidos! Así de vulgar se comporta el titular del Poder ejecutivo, la lucha abierta por conservar el poder es de carácter personal, nada de mejorar las instituciones democráticas, AMLO trata de destruirlas y, de paso, acabar con el personal que labora en ellas; si no se pliegan a sus caprichos, a todos los hace sus enemigos, si se doblegan ganan la indulgencia del totem del clan.
De sus adeptos e idólatras ni qué decir, solo emulan la conducta de su mentor, de su guía espiritual. No alcanzan a razonar, no piensan, solo repiten las mismas palabras de AMLO. No dan para más. Pero están en la misma lucha, seguir en la «ubre del poder». Les ha gustado disfrutar de las mieles que les alcanza a escurrir del poder.
Por fin, la Fiscalía General de la República, ante los descarados abusos en Segalmex, por orden judicial, esa que tanto odia el presidente López, fueron detenidos 5 exfuncionarios morenistas por el desfalco de más de 7 mil millones de pesos del erario.
Nada de no robar, no mentir ni traicionar, como reza una de tantas frases convertidas en «dogmas de fe», desgastadas de tanto uso por AMLO; esa es, sin embargo, una de las reglas primordiales de los servidores públicos del gobierno de la 4T: traicionar, mentir y robar. Pero, que no los descubran.
Los programas asistencialistas de la 4T, siguen siendo un fracaso. A los pobres los multiplicó; sembrando vida, se dedicó a destruir la naturaleza y a robar a los beneficiarios; los estudiantes becados no dan resultado alguno; los jóvenes construyendo el futuro, otro fiasco, nada se sabe de los resultados de la «capacitación y contratación para un trabajo fijo». Del sistema de salud universal, sigue siendo la mayor mentira, no hay medicamentos, ni hospitales, ni médicos y los cubanos que llegan a México, se pierden en los lugares más recónditos, nadie sabe a qué se dedican, solo que vienen a predicar la revolución socialista de Fidel ¿Los abrazos en lugar de balazos?
Ese frustrado programa de pacificación ha trascendido las fronteras, el mismo AMLO encontró otro frente de conflicto con los norteamericanos; el presidente no puede estar satisfecho si no encuentra con quien conflictuarse. Todo por defender a los carteles mexicanos y no combatirlos con toda la fuerza del Estado, como lo mandatan diversas leyes mexicanas. Billones de pesos que le sirven a López Obrador para la manipulación mediática electoral, «programas sociales de pastoreo».
Todo lo ha hecho mal el presidente de la República, salvo su política pública dedicada a las acciones destructivas. El adoctrinamiento es su pasión ¿Gobernar? Ese arte lo desconoce y no se deja ayudar. La mentira y el engaño son sus dioses.
AMLO quiere dominar y controlar todo, cual fiel tirano dictador populista. Hace caso omiso al Estado de Derecho. Si pierde las elecciones del 2024, directo a la cárcel, por eso su denodada lucha política electoral y destructora que le garantice el fraude del triunfo desde la cúpula del poder político, utilizando descaradamente todos los recursos a su alcance; será su salvación, de ganar las elecciones, para no pisar la prisión federal de Santa Martha Acatitla, junto con su cuadrilla de ladrones.
Tras La Verdad / Por: Héctor Parra Rodríguez
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